Insultos, golpes, "aprietes" por parte de familiares de heridos, amenazas de bandas enfrentadas y robos -además de la falta de insumos y deficiencias estructurales- son los principales problemas por los que deben atravesar los equipos de salud, que se ven exacerbadas sobre todo durante las guardias nocturnas.
La UPCN considera que esta situación, debe modificarse inmediatamente. El personal de salud no puede continuar prestando servicios, en ambientes desbordados, plagados de violencia e inseguridad.
Nuestra entidad gremial cree conveniente diseñar un programa de seguridad y salud, que incluya un compromiso sincero por parte de las autoridades con participación de los trabajadores.
Aunque los factores de riesgo son diferentes en cada hospital y situación de trabajo, la UPCN considera que se podrían implementar estrategias generales de prevención, que contemple medidas de seguridad como sistemas de alarma y de monitoreo, detectores de metales para impedir que las personas armadas entren al hospital, sistema de cámaras y luces adecuadas en los pasillos, etc.
En la actualidad, los trabajadores de los hospitales están expuestos a muchos peligros, la UPCN exige a las autoridades que se instrumente un programa de seguridad y salud, que atempere esta situación; de no haber respuestas a este planteo, los trabajadores de salud comenzarán con medidas consistentes en trabajo a reglamento, garantizándose guardias mínimas en los efectores en los que ocurran agresiones hacia los trabajadores. De no haber respuestas y en caso de reiterarse los hechos que ponen en peligro la vida de los compañeros, las medidas se intensificarán.
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